Decolor

El mundo de la belleza y el cuidado personal ha experimentado una evolución imparable a lo largo de los años, y uno de los elementos que ha ganado gran popularidad es el decolorante para cabello. Este producto tan versátil se ha convertido en la herramienta clave para quienes buscan cambiar radicalmente el tono de su cabello, ya sea para destacar con mechas llamativas, crear looks impactantes o simplemente explorar nuevas facetas de su estilo personal.

El decolorante es un producto químico diseñado para eliminar el color natural del cabello. Su acción principal es la de disolver los pigmentos naturales presentes en el pelo, permitiendo así la aplicación de nuevos tintes o simplemente aclarar el color existente. El ingrediente clave en la mayoría de los decolorantes es el peróxido de hidrógeno, conocido comúnmente como agua oxigenada.

Los diversos formatos del decolorante

El decolorante de pelo se encuentra en diversos formatos, cada uno con sus propias características y ventajas. Uno de los más utilizados es el polvo decolorante, que suele ser una mezcla pulverizada de peróxido y decolorante. El agua oxigenada es lo que hace posible formar la pasta que luego se aplica en el cabello. Existe también la crema decolorante, una versión más espesa y fácil de aplicar. Es adecuada para técnicas de aplicación más precisas, como la coloración de raíces o áreas específicas del cabello. Se mezcla con un desarrollador líquido antes de la aplicación. Por último, cabe mencionar el decolorante en gel. Este formato es similar al decolorante en crema, pero con una consistencia más gelatinosa. Proporciona una aplicación más controlada y es fácil de distribuir en el cabello.

¿Cuánto tiempo se deja el decolorante actuar?

Calcular cuánto tiempo se deja el decolorante en el cabello depende de varios factores, como el nivel de aclarado deseado, el tipo de cabello y la fortaleza del peróxido utilizado. En general, el decolorante suele dejarse actuar entre 20 y 45 minutos, pero lo principal es seguir las instrucciones del producto y realizar pruebas de hebras para evitar daños excesivos. El peróxido de hidrógeno, comúnmente medido en volúmenes (10, 20, 30, 40, etc.), es lo que determina la fuerza del decolorante. A mayor volumen de peróxido, más potente será el producto, pero también aumentará el riesgo de daño al cabello. Por eso, es esencial elegir el volumen adecuado según el objetivo de aclarado y la salud del cabello.

Cuidados después de la decoloración

Después de aplicar el decolorante, es fundamental seguir con cuidado un régimen de cuidado capilar. Después de la decoloración, el cabello tiende a volverse más poroso y propenso a la sequedad. Acondicionadores y tratamientos intensivos ayudarán a restaurar la hidratación y la fuerza del cabello. Por otro lado, el cabello puede volverse más susceptible al daño por calor, por lo que se debe limitar el uso de secadores, planchas y rizadores, y si se utilizan debería ser con un protector térmico que minimice los daños. Otro problema del cabello decolorado es que las puntas son más propensas a abrirse y quebrarse. Por eso es conveniente programar cortes regulares, que eliminen esas puntas dañadas. Por último, es buena idea no lavar el pelo demasiado a menudo, así como usar productos para mantener el color y, ante cualquier duda, consultar a un profesional.